jueves, 19 de febrero de 2009

1999-2007: 8 AÑOS DE “VACAS GORDAS”


Y ahora, en la negociación del Convenio Colectivo ANGED, se nos presenta la patronal negándose a debatir otra cosa que no sea la congelación salarial, según nos dicen para “evitar despidos” (sin garantizarlo), condicionando cualquier mejora salarial al aumento de las ventas y los beneficios en el conjunto de empresas del sector, y la rebaja del 20% del salario en la IT. (De la reunión mantenida el lunes 16 de febrero, la próxima será el viernes 27de febrero)

La economía, el empleo y el consumo llevan un año en crisis, y no dejan de oírse voces de la opinión publicada (CEOE y voceros), reclamando una reforma laboral, que profundice en el abaratamiento del despido improcedente. Posiblemente pretenden completar así el liderazgo que ostentamos en la Europa de nuestro entorno, en materia de contratación precaria (andamos por el 35%) y bajos salarios (9.000.000 de ellos no sobrepasan los 1.000 € /mes, cantidad a la que no llegan muchísimos trabajadores del sector de Grandes Superficies y de nuestra empresa).

Como las cifras macroeconómicas del país ya nos las cuentan otros, desde CC.OO. hemos analizado las del Grupo El Corte Inglés en el último periodo de “vacas gordas” transcurrido entre 1999 y 2007, constatando lo que sabemos todos: Que si para alguien fueron gordas, no fue precisamente para los trabajadores.

En los años de “vacas gordas” trascurridos entre el mes de diciembre de 1999 y el de 2007, el salario anual medio del conjunto de trabajadores del Grupo El Corte Inglés creció un 16,83%, pasando de 19.911€ a 23.263€, lo que supone una pérdida de poder adquisitivo del 13,7%, con respecto al crecimiento del IPC en ese periodo, que fue del 30,5% según datos del INE (www.ine.es). Si el salario promedio se hubiera incrementado en estos años, sólo en la misma cuantía que lo hizo el IPC, debería haber alcanzado la cantidad de 27.307€; por lo tanto, el promedio que cada trabajador “dona” a la empresa por esta vía, fue de 2.721€ anuales sólo en 2007, o sea: 265 millones de euros en un año.

Mientras tanto y en el otro extremo de la balanza, nos encontramos con que en esos mismos años la retribución de los 10 miembros del Consejo de Administración de E.C.I. se incrementó el 376%, pasando de 2,7 a casi 13 millones de Euros (multiplicando por 12 el IPC acumulado en los 8 años).

Entre ambos incrementos (16,83% de los salarios de los trabajadores y 376% del Consejo de Administración), hay otras cifras, a cual más beneficiosas para la Empresa: el impuesto de sociedades en bruto subió un 22,73% pero porcentualmente bajó del 50% al 30% por cada 100€ de beneficio neto. La venta media por empleado aumentó el 23,62%, el número de trabajadores de la plantilla contabilizada en jornadas completas creció el 54,21% gracias a la expansión producida en esos años. El total de las ventas y beneficios se incrementaron en el 90,64%, y 104,57% respectivamente, y el valor de los activos de la Empresa se dispararon el 116,21%... Vamos, para que nos vayan a llorar a la mesa de negociación.

No sabemos si el país necesita movilizaciones, pero no nos cabe ninguna duda que la patronal ANGED, y a su cabeza El Corte Inglés, está pidiendo a gritos una bien grande.

1 comentario:

  1. Fui trabajador de El Corte Inglés y debéis de exigir mejoras, cueste lo que os cueste. Los voceros, como llamáis de la CEOE nunca hablan de los beneficios de sus consejos de administración, y siempre hacen referencia a los despidos tan baratos del resto de países de la CE. Efectivamente, así es, el sistema de compensar el despido no sólo es más barato, apatentemente, sino que en algunos países la fórmula es algo parecido a un fondo de pensiones. El gran dilema es que los trabajadores del resto de países cobran del doble al triple que un trabajador español.
    Las verdades a medias perjudican a los que sólo se dedican a asentir con la cabeza sin contrastar esta gran verdad, y es que después de sudar sus infinitos beneficios, ahora hay que resarcir sus meteduras de pata con nuestro derecho a ser indemnizados por despido.
    No os cortéis, hablad claro.

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